El autor argumenta que un tipo particular de liderazgo se necesita en la educación médica para que ésta no sea rehén, tanto de la administración a distancia a través de métricas de reglamentación (que pueden desplazar a la creatividad local, e institucional) y de las presiones financieras en la institución. Las jefaturas departamentales se han visto a menudo como barreras a la integración y el rediseño de las escuelas de medicina. El vice-decano de educación es una figura fundamental en la consecución de este nuevo tipo de liderazgo. Leer más…